Cuando hablamos de protección contra caídas para realizar distintos trabajos de altura, existen múltiples opciones en el mercado, entre ellas las líneas verticales.
Las líneas verticales son la mejor y más segura opción para muchas ocasiones, esto se debe a que el mayor beneficio que brindan las líneas verticales son tener un punto de anclaje que viaja con la persona para que tenga la movilidad para escalar y realizar sus tareas mientras mantiene un punto de ancla por encima del anillo.
Para conocer un poco más del funcionamiento de las líneas verticales debemos tener en cuenta que el sistema suele ser una cuerda, un cable o una pista a la que la persona está conectada mediante un arnés de cuerpo entero y una cuerda de seguridad. El punto de anclaje involucrará un mecanismo como una cuerda de agarre o algo similar. Este mecanismo le permite subir y bajar, a menudo en una escalera fija, pero también se puede utilizar en otras circunstancias.
En el caso de una caída, las líneas verticales se encargarán de bloquear en su posición al «agarrar» la cuerda en un sistema de riel, en donde hay un supresor integrado en el riel que viaja con el trabajador en lugar de un agarre de cuerda. También tenga en cuenta que una eslinga autorretráctil anclada en la parte superior de una escalera fija actuaría de la misma manera y puede usarse como una especie de «línea vertical».
Líneas verticales: una decisión inteligente
¿En qué trabajos es preferible el seleccionar las líneas verticales? Para poder tomar esta decisión debemos considerar que las líneas verticales se pueden adaptar a prácticamente cualquier situación de escalada, por ejemplo, trabajadores del hierro que suben a su área de trabajo en el marco de barras de refuerzo de un muro de hormigón vertido en el lugar; siempre que su sistema pueda instalarse correctamente, una pendiente pronunciada techo, etc. En situaciones como estas, los puntos de anclaje fijos y los rieles pueden ser, en el mejor de los casos, poco prácticos y, en el peor, ineficaces. Las líneas verticales ofrecen la misma protección al tiempo que permiten un cambio en la altura a la que está trabajando.
Subir escaleras es una tarea que a veces damos por sentada como una tarea segura, pero todo lo que se necesita es un resbalón, un peldaño perdido o un mareo, para cambiar eso. Las líneas verticales son relativamente económicas y se pueden instalar rápidamente.
Asegúrese de que el tipo de líneas verticales que está utilizando sea compatible con el agarre de cuerda que disponga y, sobre todo, asegúrese de que el empleado que utiliza el sistema lo sepa. Como siempre, su solución será tan buena como la capacitación que reciban sus empleados y el nivel de cuidado y mantenimiento que brinde a su equipo.